miércoles, 17 de febrero de 2010

Marionetas

A veces, te dejas llevar por la vida, sin rumbo, sin destino, evadiendo tus responsabilidades.
Eres como una marioneta al viento, que en su intento de ser libre, termina errando en su andar sin ningún sendero pensando. Pero es solo una ligera sensación de no tener la más minima idea de que va a pasarnos. Me desespera no saber el destino de mi vida y la incertidumbre de poder respirar un día, y al otro amanecer con el cuerpo helado.

A veces, sigues ciegamente los pasos de los mayores, en tu intento de asemejarte a ellos. Pero el desafío más grande es entender y asumir que hay un tiempo para seguir a los demás, y otro para escoger nuestro camino.

No es cuestión de dejarse llevar y perdernos a nosotros mismos en el camino hacia lo que creemos nos dará la ansiada libertad, si no escoger nosotros a donde ir.
Cuando me quedo sola y pienso en como era antes de poder pensar con libertad, entiendo que cortar los hilos de las marionetas que solemos ser es doloroso, que crecer es un desafío grande y difícil. Y principalmente que no cualquiera esta listo para enfrentarlo.
El cortar nuestros hilos y poco a poco obtener nuestra libertad nos llevara por sitios peligrosos e inciertos, y a cada paso nos daremos cuenta de que no podemos volver atrás.

A veces pienso que ser una marioneta es mucho más fácil que crecer, y que estaba mejor como era antes. Pero sinceramente ansío el día en que pueda ser libre de escoger el curso de mi vida

No hay comentarios:

Publicar un comentario