martes, 16 de marzo de 2010

Sin salidas

Estaba invadida de rabia, y termine perdiendo a mi misma. Me cegué por completo, y me deje invadir por los impulsos.
Destrucción y nada mas es lo que me aguarda al final del camino.
Me encontré en una esquina del baño, llorando en un rincón, llena de odio.
Ya estoy harta. De no ver la solución, de perderme en las dificultades, de no poder soportarlo.
A veces me gustaría desaparecer, pero me doy cuenta de que esa no es la forma de escapar a la desesperación que contengo.
Estallo en mil pedazos, me desahogo en gritos y quejas que solo el escucha.
Vivo, pienso y siento debajo de esta piel herida.
Solo que nadie puede verme, solo que estoy escondida, perdida en mi donde nadie me encuentra.

A veces he cerrado mi corazón al mundo.
Poco a poco me convierto en algo que anhelo ser, pero que me gustaría evitar.

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